Planes educativos vs Ingresos mensuales

¿Sabías que el ingreso promedio mensual, para el mexicano, profesionista, es de 12 mil pesos?, ¿Qué pasaría si en lugar de ir a la universidad a estudiar, te dedicas a aprender a empreder, y emprendes?, ¿Sabías que Bill Gates, Mark Zuckerberg, Steve Jobs, Michael Dell o Henry Ford no terminaron la Universidad? Entonces, ¿Para qué estudiamos?

Analicemos el paradigma que se tiene que se debe estudiar para tener las herramientas necesarias para llegar a ser exitoso profesionalmente en nuestra vida. Que estudiando nos van a dar las herramientas para vivir una vida prospera. Sin embargo, con el dato del ingreso promedio mensual para un profesionista es de 12 mil pesos, cantidad que apenas nos alcanza para sobrevivir, no para vivir, para sobre vivir. Por ello, debemos analizar y cuestionar los modelos educativos que se tienen actualmente que nos llevan a fracasar, tanto como emprendedor como empleado, tanto como jefe como trabajador. También hay que decirlo, apenas el 5% de las empresas que nacen llegan a vivir 5 años, el resto, el 95% fracasan y muchos de ellos en el primer año.

Existen personajes, y uno importante es Robert Kiyosaki, por sus negocios y riqueza que ha logrado a lo largo de su vida y por sus libros, el más famoso de ellos, Padre Rico Padre Pobre, en el que nos explica la importancia de aprender a trabajar en el “trabajo”, argumentando que la experiencia se gana en el trabajo y nos indica que no es necesario ir a estudiar una carrera universitaria, asistir a la universidad durante 5 años para llegar a tener éxito profesional. Cursar y estudiar una carrera universitaria es el camino del Padre Pobre en su libro, quien estudia y se prepara académicamente, consigue un trabajo y un sueldo digno y vivir de ello. Sin embargo, así no conseguimos grandes éxitos profesionales. Por el contrario, el Padre Rico es quien lleva las riendas y control de su propia económica, de sus negocios y es quien da trabajo, sin la necesidad de estudiar una carrera universitaria.

Hay muchos casos de deportistas y de artistas que cuentan que sus padres para permitir que lleguen a ser deportistas y artistas sería bajo la condición de que estudiaran una carrera universitaria. Y yo me cuestiono: ¿para qué?, si ellos son excelentes deportistas y/o artistas que le permiten vivir de su cuerpo, de su físico, de su talento, y rara vez llegan a utilizar esos conocimientos que adquirieron en la carrera universitaria si es que la estudiaron. Considero que no es necesario, claro que debieran estudiar, pero capacitarse de acuerdo a lo que son y lo que logran. Tienen grandes ingresos y una propia marca que deben desarrollar, para vender playeras, conseguir contratos, conciertos, competencias, mayor número de venta de canciones, etc. En eso deberían enfocarse, no en una carrera universitaria como administración, turismo, ingeniería, medicina, o cualquier otra que no le de un incremento en su valor como marca.

Retomando los personajes, Bill Gates, Steve Jobs, Mark Zukenberg, Michaell Dell, o Henry Ford que no fueron a la universidad o que no la terminaron, pero ellos, con objetivos claros, con entusiasmo, con la disciplina que se requiere, han llegado a ser grandes personajes en la economía a nivel mundial

Permíteme platicarte un poco mi caso. Soy Ing. Civil, terminé la carrera en el 2009 y comencé a trabajar en el 2010 en un despacho de cálculo estructural. En el 2012 me cambio de trabajo en el mismo giro de cálculo estructural, donde me fue muy bien en ambos trabajos. En el 2013 – 2014 tuve la oportunidad de realizar la maestría en el extranjero, y en el 2015, a mi regreso a México constituyo un despacho de cálculo estructural. Desde entonces y a la fecha, llevo 5 años de experiencia manejando el despacho desde el puesto de Director General. A lo largo de esta década (2010-2020) he sido empleado, estudiante y director general, y me he percatado que existe un abismo enorme entre la universidad y la vida profesional. Desde el primero momento que comencé a trabajar, recién egresado de la universidad, me di cuenta de que no sabía nada y que no era capaz de realizar los proyectos que me solicitaban. Y lo que es peor, me doy cuenta de que mis compañeros que estaban estudiando aún la preparatoria, si podían hacer el trabajo que a mí me habían solicitado. Yo ingeniero civil, ya egresado de la carrera, llego al trabajo y ni siquiera como calculista, se me asigno el puesto de dibujante estructural, llegue a aprender y no podía hacer las tareas de un dibujante estructural, y que un compañero del trabajo que estudiaba la preparatoria, si podía hacer.

Después, ya en la maestría, aprendí muchos temas técnicos en el área de análisis y diseño estructural, los que me valieron para comenzar con mi propio despacho de cálculo estructural. Sin embargo, comenzando en la aventura del emprededurismo, me doy cuenta nuevamente que no estoy preparado para este nuevo reto y debo seguir aprendiendo muchas cosas más, temas nada relacionados con el cálculo estructural. Tuve que aprender desde marketing, ventas, constitución de la empresa, contabilidad, impuestos, finanzas, planeación, inversiones, seguros, entre otros muchos temas. El abismo pues, que existe entre la universidad y la vida profesional, para empleados como empleadores, es enorme.

Por lo que considero se deben hacer unos cambios en los modelos educativos que nos permita conectar, unir, y enlazar la vida universitaria con la profesional, que nos permita tener una mejor economía y calidad de vida.

¿No se dice que, para avanzar como país, tanto en México como en América Latina, se deben tener más y mejores universidades?, pero si las estadísticas nos indican que con las universidades que hay tenemos ingresos de 12 mil pesos mensuales para quien si estudia, mientras que para los que no estudian llegan a tener un ingreso promedio mensual, según el INEGI, de más de 15 mil pesos. Siguiendo con el mismo ejemplo de los deportistas y artistas, que sus sueldos llegan a ser hasta más de 100 veces de quienes estudian. Tenemos el caso de Chile, que su pueblo lucha por que se tenga una educación gratuita, y esque se tienen universidades públicas, pero cuestan tanto como las privadas. Para estudiar en Chile una carrera universitaria se necesitan años de ahorro por parte de los padres o años de crédito por parte de los estudiantes, que al terminar su licenciatura son egresados con una deuda que cargarán por varios años. Imaginemos por un momento, estás estudiando y estas pagando algún porcentaje a la universidad, sales de ella y sigues pagando, pero tienes un ingreso promedio mensual de 12 mil pesos, ¿Cuándo terminarás con esa deuda?, ¿Cuándo podrás hacerte de un patrimonio?

Dicho esto, ¿no será acaso que nos estamos equivocando, invirtiendo gran tiempo para prepararnos con conocimientos técnicos en la universidad, cuando tal vez sea mejor prepararnos físicamente para un deporte o para el arte que nos permita un ingreso mayor el promedio mensual de 12 mil pesos?, ¿No nos estamos equivocando y mal entendiendo que el camino al éxito profesional para llegar a vivir dignamente es estudiar alguna licenciatura e incluso postgrados?

A pesar de que los deportistas y artistas se quejan en ocasiones de que tienen poco tiempo para estar con sus familias por cumplir compromisos en distintas ciudades y se la pasan viajando, pero… si un futbolista entrega 4 horas al día se me hace mucho, va a su club, se entrena junto con el equipo, y después de 5 horas ya tiene todo el día libre. Mucha diferencia de las personas que estudian y de los que trabajan, el promedio de las personas, que salen de lunes a viernes, a sábado, o inclusive hasta los domingos. Muchas personas tienen un doble trabajo para alcanzar a llevar el sustento a su familia. Que decir de las personas mexicanas y Latinas que arriesgan sus vidas yendo a Estados Unidos buscando una mejora en oportunidades. Ellos sí que dejan de ver a sus familias, ellos si abandonan sus casas, ya no tienen tiempo de disfrutar a sus familias. Hablando de México específicamente, hay 30 millones de Mexicanos en Estados Unidos, estas personas que arriesgan sus vidas son verdaderos héroes, son personas que mantienen a un país, mantienen a México, siendo un país con 127 millones de habitantes. Las remesas, el dinero que mandan los mexicanos a México, es el ingreso número uno en el país, ni si quiera PEMEX llega a esos ingresos.

En este año 2020 hay un nuevo máximo histórico con 22,822 millones de dólares de ingresos por remesas en el periodo de enero a junio, y en julio de 2020 se tuvo un ingreso de 3,532 millones de dólares según el Banco de México.

Por otro lado, según estadística del INEGI, se dice que trabajamos 45 horas por semana para apenas llegar a ganar 12 mil pesos mensuales. Y la pregunta, ¿para qué trabajar tanto, por tan poco?, ¿para qué estudiar, para que tomar una carrera universitaria?

Una de las razones por la falla en el modelo educativo y económico es que no hay precisamente una carrera que nos permita y nos enseñe a trabajar eficientemente tanto como empleado o como emprendedor, mucho menos a ser empresario. Existe un programa para empresarios llamado IPADE, sin embargo, para lograr ingresar necesitas experiencia como empresario (como parte de los requisitos) y la capacidad económica para pagar estos estudios, lo que significa que quienes pueden pagarlo y tomar el programa ya pasaron el periodo crítico de sobrevivir 5 años con tu empresa. Entonces, no hay una escuela que nos permita aprender lo necesario para ser un profesionista exitoso. No existe una formación laboral que nos apoye cometer menos errores en nuestros trabajos y poder incrementar la economía y calidad de vida.

Reitero, hay un abismo entre la vida estudiantil y la profesional, tanto si eres empleado o empleador. Debemos construir un puente para unir ambas facetas y reducir el tiempo de capacitación en la vida profesional y lograr el éxito a mayor escala en menor tiempo.

Ojo, no estoy en contra, para nada, de no asistir a la universidad y estudiar una licenciatura, todo lo contrario. Estoy a favor de promover la educación hasta niveles de licenciatura y de posgrado, pero con cambios necesarios para provocar una mejora en las estadísticas y una vida digna con un sueldo mensual mayor al que actualmente se tiene. Si, estos modelos educativos han fracasado históricamente, desde que los mexicanos ven como una opción más viable arriesgar sus vidas para llegar a Estados Unidos, como también el ingreso en México que apenas nos permite sobrevivir y arrastrar las deudas.

He mencionado personajes exitosos a nivel mundial, inclusive siendo Bill Gates el hombre más rico del mundo sin haber terminado la universidad. Pongámoslo en comparación con un ingeniero, si, ingeniero civil que ha estudiado la licenciatura en la UNAM, quien ha llegado a ser el hombre más rico del mundo según la revista Forbes, y me refiero al Ing. Carlos Slim, quien si estudio y ha llegado a ser el hombre más rico del mundo. Es decir, es posible y viable que estudiando lleguemos a ser personajes que promovamos una buena economía en nuestro país. Claro que el Ing. Carlos Slim tuvo una gran escuela en casa, pues su padre con experiencia en los negocios de sus empresas puso a vender desde niño a Carlos Slim en el zócalo adquiriendo la experiencia en los negocios, que con su inteligencia supo combinar armoniosamente con sus estudios en la universidad para llegar a hacer y adquirir diversas empresas que dan servicios en diversos países del mundo. Esto es prueba de lo que considero hace falta en la economía de los países, o hablando de México, cambios en los planes educativos agregando un enfoque profesional, un verdadero desarrollo profesional que nos permita poner en práctica nuestros conocimientos técnicos y vivir de ellos. Es el Ing. Carlos Slim un ejemplo de un modelo a seguir para provocar el cambio en la economía, junto con otros personajes también, pues el Ing. Slim es quien más impuestos paga en México y más número de empleos que desarrolla, con más de 200 mil solo en México.

En base a estos ejemplos, a estos casos de grandes personajes, hemos trabajado en Marvinno Innovación Educativa para ofrecer y proponer herramientas que den soluciones a la eficacia, soluciones a tu trabajo y a tus proyectos. Siguiendo la Ley Pareto, en la que el 80% de las acciones que realizas apenas te benefician un 20% de los resultados, y de manera inversa, el 20% de tus acciones producen el 80% de resultados, hemos creado en Marvinno una plataforma en la que se dispone de diversos cursos con diversos temas teóricos dirigidos a aplicarlos en la vida práctica profesional. Acompañado de recursos como presentaciones, reportes y formularios con los que reduciendo tu tiempo de estudio y aprendizaje obtendrás mayores beneficios en tu rendimiento profesional. De esta manera eliminamos el 80% de los temas presentados en las universidades que apenas utilizamos en un 20% en la vida real.

En resumen, hemos expuesto que el ingreso promedio mensual del mexicano, profesionista, es de 12 mil pesos, y hemos analizado y cuestionado porque personajes sin haber terminado la universidad han sido referentes en la economía a nivel mundial, pero también hemos rescatado a un personaje que si estudió la licenciatura y ha llegado a ser el hombre más rico por algún momento. ¿Qué es lo que hace falta?, hace falta cambios en los modelos educativos que provoquen un incremento en la economía permitiéndonos llegar a los niveles de ingresos de un deportista o un artista con nuestros conocimientos adquiridos en la universidad. Dicho esto, presentamos en Marvinno herramientas para comenzar a dar este cambio para una mejora económica y calidad de vida.